Wednesday, May 13, 2015

Hero.

Es de héroes sonreír cuando el corazón llora.


Para todos los que me preguntan "¿qué tal estás?" cuando hablo de mi ruptura. Para los que piensan que tengo el corazón de hielo por no tener ganas de llorar a todas horas y para cada uno de vosotros, que habéis sonreido cuando por dentro estabais notando como cada pedazo del corazón se os iba clavando en las entrañas. Héroes.

No se trata de mentir, no es eso. Se trata de darse cuenta que la vida es un movimiento constante y no te puedes quedar atascado viendo como el mundo gira al rededor de tí. En el centro de miles de personas que corren de un lado para otro. 

Es un desafío constante, que requiere fuerza, apretar los dientes, estirar los músculos de la cara y seguir caminando hacia delante, sin mirar lo que dejas atrás. Porque, si se queda atrás mientras tú continúas con tu vida, realmente no es tan importante como tú habías pensado. 

Tu corazón se romperá miles de veces. Millones. Y no solo por amor. Ojalá pudiese borrar todas las veces que sentí que me clavaban un puñal en el centro izquierda de mi pecho. Pero no puedo. Por eso, depende de tí convertirte en tu heroína. Y yo, hoy lo soy.

Para mí, un héroe no tiene que salvar vidas ajenas. Un héroe es aquel que puede recomponer la suya tantas veces como sea necesario. Los que encuentran fuerzas para seguir sonriendo aunque la vida no les de las suficientes razones. Para mí, son héroes todos aquellos que muestran lo fuertes que son aún cuando sus ojos están llenos de lágrimas. 

El valor para enfrentarte a tí mismo y poder crecer. Es un superpoder que todos tenemos, pero que muy pocos practicamos. En serio, ¿no creéis que va siendo hora de dejar de dar el brazo a torcer ante la pena?